IV Edición: Recursos energéticos & mineros

¿Es factible un plan antiinflacionario México-EU, como propone AMLO?

El pasado viernes el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), realizó en su conferencia matutina tres declaraciones relacionadas con la economía que no pueden dejarse pasar por la profundidad de sus implicaciones. En esta ocasión nos ocuparemos de dos de ellas, la tercera merece un espacio aparte en días próximos.

El mandatario dijo que le propondrá al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, un plan antiinflacionario conjunto para contrarrestar las presiones que al respecto se registran en ambos países, aunque no reveló los detalles del plan que le presentaría a su homólogo norteamericano.

También, AMLO criticó fuertemente a los medios de comunicación del país por la forma en la que informaron sobre el ajuste de la tasa de referencia que llevó a cabo Banxico la semana pasada. En el primer caso, la pregunta obligada es: ¿hay viabilidad de un plan antiinflacionario entre México y la mayor economía del planeta? Estos son algunos puntos a considerar.

1) Si todo fuera tan fácil como llevar a cabo un acuerdo binacional para terminar con la inflación, seguramente ya se hubiera hecho hace mucho, sería difícil imaginar que a los economistas de ambas naciones se les pasó la “receta mágica” para acabar o disminuir considerablemente la inflación. Sin dejar de lado que este fenómeno es mundial y que golpea por igual a la economía más poderosa del mundo como la de nuestro vecino del norte, como a una débil y de muy bajo o nulo crecimiento como la nuestra.

2) Implementar un plan anti-inflacionario entre dos economías que “viven en galaxias diferentes” se dice fácil, pero hacerlo no lo es. Una cosa es ser socios comerciales y otra cosa es ser similares, no hay comparación. Por lo tanto, una serie de factores que afectan a la economía mexicana, nada tienen que ver con la estadounidense, y viceversa, por más globalizada que esté en estos momentos la inflación.

3) En Estados Unidos, y en México también, la entidad encargada de luchar contra la inflación es el banco central. En todo caso, más que proponer a Biden esta “receta mágica” para terminar con la inflación, debería ser turnada primero a Jerome Powell, el atribulado jefe de la Fed, quien el año pasado desdeñó la inflación y hoy sufre las consecuencias.

4) También en todo caso, Estados Unidos y México operan muy diferente en sus esquemas políticos y de gobierno. Si bien se dice que Estados Unidos es la mayor democracia del mundo, en los hechos los presidentes tienen las manos amarradas. Una prueba está en el plan para eliminar por un tiempo los impuestos a las gasolinas, que propone Biden, para lo cual tiene que ser autorizado por el Congreso. En Estados Unidos, a diferencia de México, los decretos presidenciales son mucho más escasos y tienen límites.

5) La inflación en Estados Unidos proviene de la parte de la demanda, es decir, de quienes quieren comprar productos y servicios. La semana pasada la misma Fed, así como diversos especialistas y exfuncionarios como Larry Summers, secretario del Tesoro en la presidencia de Bill Clinton, señalaron que posiblemente el desempleo crecerá en los próximos meses para tratar de “enfriar” a la economía. No es sólo proponer y ya, la economía de nuestro vecino del norte es muy compleja, tanto que a veces ni siquiera ellos mismos la entienden.

Muchas dudas quedan al respecto, sinceramente el plan antiinflacionario México-EU parece más una ocurrencia que algo serio. La economía necesita en estos momentos tan complejos además de precisión en las estrategias, iniciativas serías y profesionales.

AMLO critica a medios por cómo informaron sobre alza de tasas

El segundo punto se refiere a la crítica presidencial contra los medios de comunicación por la forma en la que informaron sobre el aumento en la tasa de referencia de Banxico.

Como sabemos, el pasado jueves 23 de junio el Banco de México aumentó en 75 puntos base la tasa de referencia para colocarla en 7.75 por ciento.

Varias cosas al respecto.

1) Efectivamente, en descargo del enojo presidencial, algunos medios, no todos, fueron poco precisos porque señalaron que se trataba del mayor aumento en la historia. Digo que fueron poco precisos porque en la lectura al interior de sus textos añadían correctamente lo que querían decir, parece que fue un error, como le puede pasar a cualquiera.

En realidad, el ajuste de Banxico fue el mayor desde que este utiliza la tasa de referencia como herramienta de política monetaria, es decir, es el mayor ajuste en la historia de la tasa de referencia, no el mayor ajuste de la historia porque para eso estamos a años luz y ojalá nunca más lleguemos a dichas instancias.

2) Sin embargo, el enojo presidencial llevó a qué se registraran varias imprecisiones y hasta descalificaciones sin sentido para un gobierno que apuesta a la transparencia. Por ejemplo, los medios nunca dijeron que la tasa de 7.75 por ciento era la mayor de la historia, para la cual también estamos a años luz, ni siquiera mencionaron que fuera la más alta de la historia de la tasa de referencia como herramienta de política monetaria.

3) La administración “interioriza” el aumento de la tasa y lo toma como si fuera una decisión propia, cuando es realizada por un organismo autónomo como el Banco de México.

Con sus declaraciones, el presidente trata de llevar a la sociedad a un debate sobre subir o no subir la tasa de interés, ese tema lo podemos tratar aparte sólo es importante mencionar que es hora de los “técnicos”, dejemos que hagan su trabajo. Por décadas se tomaron en nuestro país decisiones económico-políticas, así nos fue, ojalá no volvamos a repetir ese error. Asimismo, se dice que se respeta la autonomía de Banxico, pero la crítica dice otra cosa. No es que el gobierno no tenga derecho a criticar, pero su papel es distinto al de la mayoría de los actores de la sociedad, para un banco central no es lo mismo una crítica de un medio de comunicación, de un humilde periodista o de otro tipo de ciudadano, que la del gobierno.

4) Ojalá los medios siempre informen de este asunto de las tasas de interés, y que lo hagan cada vez más, incluso si en ello hay equivocaciones, como puede suceder a todo ser humano. Es seguro que casi ningún medio se equivoca con ganas de molestar al gobierno en turno o al que sea, los medios están para informar a la sociedad y nunca pueden ni deben perder de vista dicho objetivo. Si el nivel de las tasas de interés es muy alto y eso se convierte en un obstáculo para el crecimiento económico, debe señalarse tal cuál, más sus causas, efectos, perspectivas, etc; se supone que ya superamos viejos tiempos.

5) El aumento de las tasas de interés en México y en el mundo ya es considerable, en algunos casos podría decirse que brutal.

En nuestro país, un año atrás de cuando se escriben estas líneas, la tasa de referencia estaba en 4.25 por ciento, hoy está 350 puntos base arriba, 3.5 puntos o 3.5 por ciento. El impacto en los bolsillos es significativo y lo tenemos que saber todos, para bien o para mal.

En resumen: Un plan anti-inflacionario México-EU no podrá tomarse en serio mientras no haya datos, cifras y estrategias sobre la mesa. Por otro lado, la sociedad mexicana y de todo el mundo debe enterarse lo que sucede en temas tan trascendentales como el de las tasas de interés, incluso si hay molestia, es algo vital y necesario.